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Piso 25, una caída al otro mundo.

  • Por: Ricardo Rodríguez.
  • 16 jul 2016
  • 2 Min. de lectura

Cuatro edificios que causan pánico a la comunidad, estructuras paralizadas desde hace más de treinta años por razones extrañas, tan difíciles de explicar como de creer, las torres del Sisal apodadas “las torres malditas” ha cobrado múltiples vidas a través de voces que te conducen al final del abismo, dejándote llevar por la sensación dulce y terrorífica hacia un destino oscuro, sin salida y sin regreso.


Venezuela, Lara-Barquisimeto, en los años setenta el expresidente Carlos Andrés Pérez decide edificar un proyecto, una serie de diez edificios con veinticinco pisos cada uno, entusiasmado por tan grandioso proyecto y más aún por ser uno de los gobiernos más ricos en su historia política, pero, durante la culminación de la primera etapa las alarma alertan algo que los geólogos como ingenieros coinciden que el territorio era inestable y un riesgo si llegase a ocurrir sismos que posiblemente trajera consecuencias lastimosas.



Todo inicia tras una mala decisión del dueño de la constructora, al verse en bancarrota decide culminar sus problemas dejándose caer desde último piso, pero este no fue el primer paso al terror, la energía negativa y fría mora entre sus muros abandonados, hoy en día es refugio de indigentes, asaltos, actividades satánicas, a pesar de la simplicidad y poca apariencia infernal que presentan estas “torres malditas” muy pocas personas son las que se atreven a entrar allí.


Testigos afirman escuchar voces como “tu vida no vale la pena” o “lánzate” lo extraño es que sus voces solo las escuchan en sus sueños, otros, viven con el traumático recuerdo de ver como personas caen desde los pisos más altos de las torres, los aquelarre o misas diabólicas son practicadas allí frecuentemente, aunque para algunos esto es solo un mito, para otros esto es un fragmento del infierno, las coincidencia entre personas que aseguran escuchar voces dulces que te llevan a la muerte, con los treinta suicidios que han ocurrido allí. Los avistamientos y voces son de las víctimas que las torres se llevaron a sus rincones.


Almas vagando, voces que te seducen hasta morir, invocaciones del diablo, algunas veces sacrificios de animales, sangre, secretos que se ocultan en los muros, secretos que solo conocerás segundos antes de irte de este mundo, son parte de esta leyenda urbana que causa terror al sector del sisal, y que hoy en día esas voces son escuchadas, ninguno hasta hoy ha aprobado la culminación de dichas torres, sin embargo ¿te atreverías a vivir allí algún día?.


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